SANTO DOMINGO.-Haití suma un ingrediente más a la lista de cosas que generan preocupación a las autoridades dominicanas, incluso a las de Estados Unidos: la expansión del Islam en su territorio promovido por naciones donde se anidan grupos extremistas.
Esto gracias al financiamiento de organizaciones musulmanas que han encontrado un terreno fertilizado por la miseria, la corrupción y la escasez en la que vive la mayor parte de los haitianos.
Abu Qasim acostumbra a socorrer a menores de edad.
Los reportes al respecto han causado preocupación entre las autoridades dominicanas y norteamericanas, debido a la posibilidad de que debido a la fragilidad institucional haitiana y la corrupción en ese país se instalen células de grupos fundamentalistas que miran en Occidente a sus enemigos.
En un informe al cual tuvo acceso EL DÍA se indica que muchos haitianos que profesan el cristianismo y que ocupan posiciones de liderazgo en sus comunidades han empezado a aceptar el Islam como religión, buscando una mejora en sus condiciones de vida y atraídos inicialmente por las dádivas.
La rápida proliferación del islamismo en Haití y su presencia en cada vez más amplias zonas del territorio haitiano ha sido un llamado de atención por los organismos de seguridad, tanto de República Dominicana como de Estados Unidos.
Nuevas edificaciones
La rápida construcción de nuevas edificaciones para ser utilizadas en el adoctrinamiento en el Islam se relaciona con el financiamiento recibido por grupos islámicos de países del Medio Oriente.
Las mezquitas contrastan con la pobreza de su entorno, lo que le permite captar seguidores atraídos por la repartición de alimentos y otras dádivas.
Uno de estos casos es el de la mezquita Masijd Wassila, ubicada en la localidad del Pignon, en el departamento Norte de Haití, lugar en el que previamente existía una iglesia cristiana cuyos feligreses aceptaron la religión de Mahoma.
En el informe se indica que República Dominicana debe esmerar las medidas de seguridad en la zona fronteriza, al igual que sus labores de inteligencia.
Un caso que ha llamado la atención es la del imán identificado como Abu Qasim, de nacionalidad haitiana, quien está a cargo de la mezquita Shafak Mosquee ar Dessaline, ubicada en el municipio Marchand Dessaline, del departamento Artibonito de Haití, con relativa cercanía a la frontera.
En imágenes se puede observar cómo Qasim realiza los rituales que caracterizan a la religión oriental, a la vez que realiza obras de caridad consistentes en la entrega de comida a decenas de menores de edad.
Los extremos
La rama más violenta del fundamentalismo islámico es el yihadismo, que invita a sus seguidores a realizar una guerra santa en contra de los infieles y que ha protagonizado miles de ataques en el oriente, Europa y occidente.
Haití aún no supera la muerte de su presidente Jovenel Moïse y las bandas armadas han asumido el control parcial de su territorio, utilizando el secuestro como vía de financiación.
Construcción
— Muro
Las autoridades dominicanas iniciaron la construcción de una verja perimetral física y tecnológica a los fines de mantener custodiados permanentemente los puestos fronterizos y zonas poco frecuentadas.